Introducción
El transporte de contenedores en México se encuentra en un momento crucial. Con un crecimiento sostenido en los principales puertos del país y una creciente demanda internacional, la logística marítima se posiciona como un pilar estratégico para la economía nacional. Sin embargo, este auge también presenta desafíos relacionados con la sostenibilidad, infraestructura y tensiones comerciales internacionales. Este artículo analiza a fondo estas dinámicas, explorando oportunidades e implicaciones para empresarios, inversionistas y responsables de políticas públicas.
El auge del transporte de contenedores en México
El sector portuario mexicano ha registrado un incremento notable en el transporte de contenedores. El Puerto de Manzanillo lidera esta actividad al manejar el 42% del total nacional, consolidándose como el nodo logístico más importante del Pacífico. Por su parte, el Puerto de Lázaro Cárdenas reportó un crecimiento del 14% en el primer semestre de 2025, lo cual demuestra una tendencia sólida en la diversificación de rutas comerciales.
Un evento emblemático fue el arribo del buque portacontenedores ONE SINCERITY, lo que subraya la capacidad de México para recibir embarcaciones de gran escala. Este tipo de embarcaciones permite economías de escala, reduciendo costos por unidad transportada y aumentando la competitividad logística.
Este crecimiento consolida a México como un hub estratégico para el comercio internacional, especialmente en el contexto del nearshoring y la relocalización de cadenas productivas.
La sobrecapacidad portuaria: una amenaza latente
A pesar del crecimiento actual, los especialistas advierten que el sector portacontenedor a nivel global podría enfrentar un escenario de sobrecapacidad hacia 2027. La sobreoferta en infraestructura y flota puede generar una caída en las tarifas, afectando la rentabilidad de las navieras y operadores portuarios.
En México, aunque los puertos están en expansión, aún existen cuellos de botella logísticos y retos en eficiencia operativa. Si no se gestiona de forma estratégica, la sobrecapacidad podría traducirse en inversiones subutilizadas y altos costos de mantenimiento.
Por tanto, es crucial adoptar una planeación portuaria integral que considere proyecciones de demanda realistas y promueva la colaboración público-privada para una expansión sostenible.
Nearshoring: ventaja competitiva para México
El fenómeno del nearshoring consiste en la relocalización de cadenas de suministro más cerca del mercado final, y México se presenta como un destino clave para este proceso, especialmente desde Estados Unidos. Factores como la cercanía geográfica, el T-MEC y una fuerza laboral calificada posicionan al país como una alternativa viable frente a Asia.
Empresas del sector automotriz, electrónico y textil han comenzado a establecer operaciones en estados como Nuevo León, Chihuahua y Querétaro. Este movimiento ha elevado la demanda por servicios logísticos y portuarios, creando oportunidades para el desarrollo de infraestructura estratégica.
El nearshoring no solo incrementa el volumen de exportaciones, sino que también impulsa el valor agregado de los productos mexicanos, fortaleciendo la balanza comercial.
El impacto de las tensiones comerciales con EE. UU.
Las tensiones comerciales con Estados Unidos, especialmente bajo políticas proteccionistas, han generado incertidumbre para el comercio exterior mexicano. Propuestas de aranceles del 30% a importaciones mexicanas y del 25% a vehículos han encendido alertas en sectores clave como el automotriz.
No obstante, el 85% de las exportaciones mexicanas a EE. UU. todavía gozan de cero arancel gracias al T-MEC, lo cual demuestra una base institucional sólida. El gobierno mexicano trabaja activamente en la revisión de este tratado para asegurar su continuidad y minimizar impactos negativos.
Aunque la incertidumbre persiste, la diversificación de destinos y la mejora en infraestructura logística pueden mitigar estos riesgos a mediano plazo.
El Congreso AMANAC 2025 y su relevancia
La Asociación Mexicana de Agentes Navieros (AMANAC) celebrará su congreso anual en Veracruz en 2025. Este evento reunirá a líderes del sector marítimo, autoridades gubernamentales y expertos en economía global para discutir el papel del transporte marítimo en una economía interconectada.
Uno de los temas centrales será la sostenibilidad en los puertos y la descarbonización del transporte marítimo, aspectos cruciales para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y las regulaciones internacionales en materia ambiental.
Este congreso representa una plataforma clave para alinear estrategias entre el sector público y privado, y para posicionar a México como un referente en logística marítima sustentable en América Latina.
Sostenibilidad y descarbonización portuaria
La sostenibilidad portuaria se ha convertido en una prioridad global. El transporte marítimo representa cerca del 3% de las emisiones de CO₂ a nivel mundial, lo que ha motivado a la Organización Marítima Internacional (OMI) a impulsar regulaciones más estrictas.
En México, algunos puertos como Veracruz y Altamira están adoptando medidas como el uso de energía renovable, electrificación de grúas y control de residuos. Sin embargo, aún queda camino por recorrer en términos de inversión y tecnología para alcanzar estándares internacionales.
La descarbonización del transporte marítimo no es solo un imperativo ambiental, sino también una ventaja competitiva en mercados que priorizan cadenas de suministro verdes.
Infraestructura portuaria: inversión urgente
Para sostener el crecimiento del comercio marítimo, México necesita modernizar su infraestructura portuaria. Esto incluye ampliar terminales, automatizar procesos y mejorar la conectividad terrestre desde los puertos a los centros logísticos.
El Puerto de Manzanillo ha iniciado proyectos de expansión que incluyen nuevas grúas pórtico y patios de contenedores. Lázaro Cárdenas también contempla una segunda terminal especializada para carga contenerizada.
Estas inversiones no solo aumentan la capacidad operativa, sino que también mejoran la eficiencia y reducen los costos logísticos, lo que es fundamental para atraer inversiones extranjeras.
La cadena de frío: clave para exportaciones perecederas
Uno de los segmentos con mayor potencial en el comercio exterior mexicano son los productos perecederos, como frutas frescas, flores y productos del mar. Para asegurar su calidad y competitividad en mercados internacionales, es indispensable fortalecer la cadena de frío.
Actualmente, solo el 30% de los puertos mexicanos cuenta con infraestructura especializada para carga refrigerada. Esto limita la capacidad exportadora de productos de alto valor, especialmente hacia mercados exigentes como Europa o Asia.
La inversión en almacenes refrigerados, transporte térmico y monitoreo digital es crítica para consolidar a México como líder en agroexportaciones.
El T-MEC como herramienta estratégica
El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) ofrece ventajas arancelarias y reglas de origen que pueden ser aprovechadas por empresas mexicanas para aumentar su competitividad. La clave está en entender las reglas del juego y adaptar las operaciones a los estándares del tratado.
Por ejemplo, las empresas automotrices deben cumplir con un 75% de contenido regional para calificar a cero arancel, lo que ha llevado a una reconfiguración de proveedores y procesos productivos.
Prepararse para la revisión del T-MEC en 2026 es esencial para mantener una relación comercial fluida con el principal socio económico de México.
Perspectivas económicas para 2025 y 2026
El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé un crecimiento económico moderado del 1.0% para México en 2025, con una posible aceleración en 2026. Factores como el nearshoring, la inversión extranjera directa y la recuperación del consumo interno podrían impulsar este repunte.
Sin embargo, el contexto global sigue siendo incierto. La fragilidad del comercio marítimo internacional, la inflación persistente y los conflictos geopolíticos pueden afectar el dinamismo económico.
Es vital que México continúe diversificando su economía y fortaleciendo sectores estratégicos como logística, manufactura avanzada y energías limpias.
Recomendaciones estratégicas para empresas
Para enfrentar los desafíos actuales y aprovechar las oportunidades del comercio global, las empresas mexicanas deben adoptar un enfoque proactivo. Algunas acciones clave incluyen:
- Aprovechar al máximo las preferencias arancelarias del T-MEC.
- Invertir en infraestructura logística y tecnológica.
- Adoptar prácticas sostenibles y certificaciones ambientales.
- Especializarse en productos de alto valor agregado.
- Fortalecer alianzas comerciales y cadenas de suministro regionales.
Estas estrategias permitirán aumentar la resiliencia ante choques externos y mejorar la competitividad global.
Conclusión
El transporte de contenedores en México atraviesa una etapa de expansión con oportunidades importantes para los sectores productivos. No obstante, también enfrenta retos estructurales que requieren atención inmediata. La inversión en infraestructura, sostenibilidad, relaciones comerciales estratégicas y adopción tecnológica será clave para que México consolide su rol como potencia logística en América.
Las empresas que se anticipen a estas tendencias, optimicen sus operaciones y aprovechen los tratados internacionales estarán mejor posicionadas para competir en un entorno global cada vez más complejo. El momento de actuar es ahora.




